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Mientras el sol calienta en Kairuán, podemos apreciar el gran potencial de Túnez para la energía solar. Para aumentar la capacidad de energía solar del país, el gobierno tunecino ha realizado una gran inversión en el sector. Muchos granjeros ya han recibido ayudas para que sus pozos y sus sistemas de irrigación funcionen con energía solar. La agencia estatal también ofrece descuentos para los hogares que calienten el agua con paneles solares.

Cinco jóvenes emprendedores de Kairuán, al ver la oportunidad en este creciente sector, decidieron lanzar sus propios negocios. Cada uno de estos emprendedores tiene una trayectoria particular, pero hay muchas similitudes en sus caminos. Tras graduarse en el ámbito de la electrónica y la ingeniería eléctrica, todos cosecharon cierta experiencia laboral vital antes de afrontar retos parecidos al lanzar sus proyectos de emprendimiento. En 2017, sus caminos se cruzaron en un curso formativo de 40 días sobre mantenimiento y sistemas de irrigación que organizaba el Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH en colaboración con el ministerio de agricultura tunecino. Aquello fue el comienzo de una amistad que ha florecido con el apoyo del proyecto Mashrou3i.

“Formábamos parte de un grupo de 40 agroemprendedores que participábamos en un curso formativo en un centro especializado de Kairuán”, explica Bassem Ben Gadour. “Los cinco fuimos seleccionados para recibir una ayuda para la adquisición de materiales para el mantenimiento de sistemas de irrigación, y rápidamente nos hicimos amigos”.

Tras la formación los jóvenes emprendedores se centraron en la creación de sus empresas emergentes. El asesoramiento empresarial impartido por el proyecto Mashrou3i (una colaboración público-privada entre la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), la Cooperación Italiana, la HP Foundation y la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial) les ayudaron a fortalecer sus negocios y destrezas informáticas.

“El autoaprendizaje en la plataforma en línea de HP LIFE y las sesiones formativas presenciales de Mashrou3i me ayudaron a que la idea abstracta que tenía de mi proyecto se convirtiera en algo más tangible”, afirma Nizar Lijini.

El proyecto Mashrou3i también ofrece a los jóvenes emprendedores amplio asesoramiento empresarial y asistencia técnica bajo la forma de numerosas formaciones en ventas, comunicación y administración. Para ayudarles a fortalecer sus destrezas técnicas, Mashrou3i también ayudó a los emprendedores con una formación en materia de bombas hidráulicas e instalación de paneles fotovoltaicos para la irrigación rural.

“El curso abarcaba tanto teoría como práctica”, afirma Naiem Elouzi. “No es habitual encontrar una formación tan amplia y efectiva en nuestro campo. Pasados 10 días, sentí que conocía la industria fotovoltatica de la A a la Z”.

La amistad surgida entre los emprendedores también ha hecho que la competición se transforme en cooperación. Ahora se apoyan entre ellos para lograr sus metas y se recomiendan clientes entre sí si no tienen capacidad para asumir el trabajo.

“Esta formación nos acercó mucho”, añade Naiem. “Sabemos que al trabajar juntos todos podemos aumentar nuestra cuota de mercado y crecimiento del negocio”.

“Actualmente estamos motivados para acceder a nuevos mercados y captar una mayor clientela, una institución estatal, por ejemplo, lo que supondría un verdadero trampolín para nosotros”, indica Amor Guallaoui con gran ambición.

Hoy, el futuro le sonríe a estos cinco emprendedores. Con cerca de 418 000 dinares tunecinos de fondos de inversión combinados y 8 puestos de trabajo ya creados, confían en el impacto positivo que tendrán en el desarrollo de los sistemas de irrigación en la región agrícola de Kairuán.

“Tan pronto como florezca mi proyecto, pretendo crear aproximadamente 5 puestos de trabajo más. Con el apoyo de Mashrou3i, tengo más confianza”, indica Saber Ayadi. “La energía solar puede usarse en la agricultura de muchas maneras, los granjeros ahorran dinero y beneficia al medioambiente. Además, genera nuevas oportunidades laborales que, de otro modo, la agricultura tradicional no podría ofrecer a jóvenes como nosotros”, concluye.

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